En muchas ocasiones, cuando bebemos agua siempre nos asalta la duda de si el agua está purificada y por tanto si al consumirla no estamos ingiriendo algún elemento nocivo para la salud.Por esto, en estas situaciones donde tomemos agua sin saber si está purificada, podemos de manera sencilla saber si el agua es purificada y libre de elementos dañinos para la salud.
¿Qué es el agua purificada?
Para empezar, el agua purificada es aquella que ha pasado por un sistema de purificación, en la cual por medio de la absorción se ha librado de patógenos o agentes que no son parte de ella, aquí hablamos de microorganismos, bacterias, gérmenes y elementos químicos nocivos.
En general, para que el agua esté purificada debe pasar por un proceso de purificación por medio de distintos dispositivos o mecanismos.
Entonces, ¿cómo saber si el agua es purificada?
Para saber si el agua es purificada podemos en primera instancia observarla detenidamente y si vemos un color extraño, un olor extraño o un sabor extraño, en efecto no está purificada.
En detalle, el agua es incolora, inolora e insípida; por tanto no debería de tener ningún color, sabor u olor.
Ahora bien, si aun así necesitamos poder certificar que esté purificada, podemos tomar un vaso y ponerlo a contraluz si aparecen manchas blancas en el agua, entonces no está purificada.
¿Cuál es la diferencia entre agua filtrada y purificada?
La diferencia radica en el tratamiento y el resultado en el agua. Mientras que el sistema de filtrado es puramente para partículas duras que puedan estar presentes en el agua, el sistema de purificación trata de impurezas o patógenos que son parte del agua.
En tal sentido, ambos sistemas son necesarios pero radicalmente distintos y con propósitos diferentes en lo que se refiere a dejar pura y limpia el agua para el consumo.
¿Qué tan pura es el agua purificada?
Se puede decir que llega a estar un 99% pura y libre de patógenos o bacterias nocivas para la salud. Esto también dependerá del tipo de dispositivo y su sistema de purificación que tenga la persona.
En conclusión, ¿cómo saber si es agua purificada?
Para concluir, el agua purificada la podemos ver en distintas maneras, en principio con observarla detenidamente, la misma no debe parecer turbia y presentar colores extraños u olores extraños.
El sabor por su parte debe de ser lo más neutral posible, si tiene un ligero sabor a metálico, terroso u otro podemos decir que no está purificada. De tal manera, que lo principal es saber que el agua no debe de tener ningún color, ningún olor y ningún sabor.
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